De las mantequillas y aceites alternativos o la dieta FODMAP al combate contra el desperdicio y la guerra al plástico, este sector se inclina a lo sano y sostenible así como al activismo
Al igual que lo que vimos en gran parte del mundo, cuando analizamos a los consumidores en países como Argentina, Brasil, Colombia y México identificamos el deseo por una alimentación sana y sostenible, además de una preocupación acerca de la manera en la que sus elecciones afectan al planeta y a la sociedad. Hasta hace poco, las tendencias del sector de alimentos y bebidas estaban, en general, dominadas por la búsqueda de nuevos ingredientes y sabores, súper alimentos o dietas de moda. En los últimos años, sin embargo, las tendencias están cada vez más interconectadas a nivel global y el interés por el impacto de los alimentos en el medio ambiente está cobrando cada vez mayor relevancia —ya sea en relación con las emisiones de gases de invernadero, el calentamiento global, la disminución del agua disponible para la agricultura o la creciente preocupación por el desperdicio y el uso de plástico en envases—.
Mientras que todavía es cierto que muchas de las tendencias en América Latina se originan en Europa o Estados Unidos, esta dinámica se ha diversificado. Asia está ganando un papel cada vez más relevante en influir las costumbres, los sabores y las dinámicas de mercado. Paralelamente, productos de origen de América Latina, tales como el açaí o la yerba mate, ya son comunes en algunos mercados internacionales. Lo más importante para entender las tendencias es tener claro que cada mercado cuenta con su propio momento de madurez y no todo lo que funciona "allá afuera" tiene éxito internamente. Las realidades socioeconómicas, el clima y las tradiciones son determinantes cuando el tema es la comida. Es por eso por lo que, mientras que en los Estados Unidos podemos apreciar un incremento en el uso de estudios de ADN para mapear posibles enfermedades y determinar la mejor dieta a seguir para cada quien o que los drones están siendo probados como una alternativa para los envíos a domicilio, ninguna de estas tendencias se ha replicado en los países de América Latina.
Al igual que en gran parte del mundo, los consumidores de la región también buscan alternativas sanas y sabrosas para sus bebidas —con el té ganando terreno en sus diferentes presentaciones y mezclas—. Asimismo, los consumidores buscan agregar más nutrientes a sus recetas con el uso de polvos de plantas (superpowders) y no descartan experimentar con combinaciones exóticas de sabores. Adicionalmente, las personas ahora se preocupan más por el rol de las marcas en la mejora de la sociedad.
Estas son las tendencias más destacadas en América Latina que reveló el Informe Global de Tendencias 2019:
Súper polvos de plantas poderosas
Los suplementos nutricionales y las bebidas funcionales ya son tendencias consolidadas, pero estamos observando la aparición de polvos de hierbas, raíces y plantas tradicionales que se utilizan para mejorar las funciones cerebrales, retrasar el envejecimiento, mejorar el sueño, la salud mental y el bienestar físico. Se trata de súper polvos de plantas poderosas (superpowders). Del colágeno al moon milk, estos productos se incorporan fácilmente a otros alimentos y están disponibles en las estanterías de tiendas de autoservicio o farmacias.
Mantequillas y aceites alternativos
Cada vez es más sencillo que los consumidores encuentren alternativas para mantequillas y aceites. Entre los productos más destacados se encuentran las mantequillas de aguacate, coco o semilla de calabaza, así como los aceites de linaza o de chía. Cada una de estas grasas aporta distintos beneficios a la salud, además de agregarles sabor y textura a los alimentos.
Dieta FODMAP
El término FODMAP es un acrónimo en inglés de "Fermentable Oligo-, Di-, Mono-saccharides and Polyols", que puede ser traducido como oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables. Es decir, todos los azúcares y algunos carbohidratos encontrados en la comida que pueden generar problemas para personas con síndrome de intestino irritable (se calcula que alrededor de 15 % de la población mundial presenta esta condición). Muchos alimentos, tales como la manzana, la coliflor y el ajo son ricos en FODMAP y evitarlos implica mejoras a la digestión en general, lo cual contribuye a evitar los síntomas del síndrome de intestino irritable u otras enfermedades similares. El tratamiento consiste en sustituir alimentos, y algunas empresas ya ofrecen versiones de sus productos libres de FODMAP.
Combinaciones inusitadas
De las combinaciones más apetitosas como el caramelo con sal a las más polémicas como galletas Oreos sabor pollo especiado, muchos sabores exóticos son creados solo para despertar curiosidad. Pero hay una explicación científica que explica por qué estas mezclas tienen un gran potencial y seguirán siendo tendencia. El contraste de sabores, aromas y texturas (dulce/salado, graso/ácido) se traduce en una experiencia más profunda para el paladar. Es por eso por lo que las combinaciones —como helado de aceite de oliva— llevan nuestras papilas gustativas a otros niveles.
Hora del té
Los beneficios del té, ampliamente divulgados y conocidos, contribuyen a que esta bebida sea una de las favoritas tanto en Oriente como en Occidente. Sin embargo, todos los años, nuevas combinaciones contribuyen a que el té continúe haciéndose progresivamente popular entre los más diversos paladares. De los mercados de Taiwán se han masificado dos tendencias globales: el omnipresente té boba o té de perlas y el té de queso. Por otro lado, nuestra hierba mate, tan popular en América del Sur, está ganando terreno en el mundo.
La guerra al plástico
La ONU le ha declarado la guerra a la contaminación por plásticos en los océanos y las redes sociales circulan fotos descorazonadoras de tortugas marinas que mueren por ingerir plástico. Sin duda, la conversación en torno a los plásticos es de suma importancia para el sector. En 2018, la prohibición de pajitas para sorber bebidas en diversos lugares del mundo generó seguidores y críticos. Las marcas toman la delantera y ciudades enteras e inclusive estados como California se adhirieron a esta tendencia.
Impuesto a la carne
Las previsiones acerca de la preservación del planeta y la salud humana son sombrías en lo que respecta al tema de la carne. Según The World Resources Institute, se espera que el consumo de carnes aumente 82 % globalmente de 2006 a 2050, con serios impactos a la salud de los consumidores y al medio ambiente. Activistas y expertos ya discuten un impuesto sobre la carne con fines de reducir el consumo.
Residuos prósperos
La preocupación por el desperdicio de alimentos es un tema que ya tiene mucho tiempo sobre la mesa. Desde hace ya algún tiempo, un número cada vez mayor de emprendedores ha encontrado maneras de ayudarles a las personas y al planeta en materia de residuos alimentarios, haciendo crecer al mismo tiempo sus cuentas bancarias. Existen diversas soluciones en varias etapas de la cadena, tales como transformar los huesos de aguacate en cubiertos compostables o usar restos de almendras para producir azúcar o cerveza.
Restaurantes fantasma
Hay un nuevo concepto de restaurante que está entrando en boga. Se trata de espacios sin mesas, sillas ni meseros: son establecimientos que funcionan solo para entrega a domicilio. Una de las ventajas que aprovechan estos empresarios es economizar en el alquiler y los gastos con empleados.
Comida para el bienestar
Más que nunca, las elecciones alimentarias están filtradas por las lentes de la ética. Esto abarca temas relacionados con las condiciones de trabajo, inmigración, desnutrición y obesidad, así como con el uso del agua, la biodiversidad o la salud del suelo. Según el estudio global Edelman Earned Brand 2018, 54 % de los consumidores del mundo creen que es más fácil para las marcas liderar movimientos de cambio social que para los gobiernos.
Jaqueline Januzzi es Gerente Global de Alimentos y Bebidas en Edelman.