Crecer en Colombia me dio una perspectiva de lo que es importante y urgente en la vida. Tener un techo sobre la cabeza, acceso a condiciones dignas de vida, agua y comida son cosas importantes. Lo que es urgente, en mi opinión, es la empatía por los demás y la disposición de ayudarnos unos a otros cuando la necesidad surge.

Han transcurrido varias décadas desde aquel entonces. Hoy, como líder en una de las oficinas de Edelman, esa perspectiva que tuve de niño la vivo a través de mi trabajo y en cómo pienso que debemos ejercer nuestro poder e influencia en el mundo. Para aconsejar debidamente a nuestros clientes, necesitamos estar conectados con las comunidades que servimos. Es por ello por lo que Puerto Rico se volvió un foco de atención para mí y para nuestra oficina en Miami.

Han pasado más de siete meses desde que el huracán María golpeó Puerto Rico, pero la vida aún está lejos de volver a la normalidad para la mayor parte de la población en la isla. La situación hoy, en algunas áreas, es igual de terrible que como lo era en octubre: sin agua potable o electricidad. De hecho, 20 % de Puerto Rico no tiene electricidad y la construcción de nuevos techos permanentes todavía no comienza.

Hay personas que no han podido regresar a sus hogares, y miles de puertorriqueños se han visto obligados a dejarlo todo y mudarse a Estados Unidos. Hasta el día de hoy, más de 135,000 personas se han reubicado al sur de Florida, con lo que la comunidad puertorriqueña ha superado un millón de personas.

Frente a este contexto, decidimos poner en acción todos nuestros esfuerzos del programa Citizenship en Miami para apoyar a Puerto Rico en 2018. Como la firma de comunicaciones integradas más grande del mundo, nos dimos cuenta de la tremenda responsabilidad que tenemos para liderar el cambio y poner en práctica los valores de nuestra empresa.

Así es como nació la campaña “Reconstruyendo con Amor”. Una iniciativa enfocada en restaurar el sentido de comunidad en Puerto Rico. Existen muchos esfuerzos encabezados por innumerables organizaciones para ayudar a reconstruir hogares, pero ninguno está enfocado en ayudar a sanar estas comunidades. Nosotros queríamos hacer las dos cosas: pasar tiempo en las comunidades más afectadas haciendo limpieza y reconstruyendo casas, a la par que también animábamos a las personas a parar lo que estaban haciendo y tomarse un momento para decirles “gracias” o “te quiero” a los demás miembros de la comunidad que han estado apoyándolos durante estos tiempos difíciles.

Durante una semana, cinco colegas de Edelman Miami visitamos varias comunidades en el pueblo de Toa Baja, uno de los lugares más afectados de la isla. Nos llevamos una máquina de escribir antigua y, mientras pintábamos y limpiábamos, tuvimos tiempo para conocer a la gente y escribirles notas a sus familiares y amigos. Algunos lloraron, algunos rieron y, por un momento, todos miraron más allá de sus dificultades y se vieron unos a otros no como un sistema de apoyo, sino como viejos amigos, familia y vecinos.

Aunque apreciaron tener un hogar limpio, apreciaron aún más sentir una conexión humana.

Remover escombros, pintar casas y desinfectar hogares son labores importantes. Pudimos hacer esto mientras estuvimos en Puerto Rico y fue muy valioso. Sin embargo, lo más valioso fue la oportunidad que tuvimos de trabajar en lo más urgente: lograr que la gente supiera que son amados y que todo puede mejorar cuando hay empatía y la voluntad de ayudarnos unos a otros.

Esta iniciativa continúa tras nuestra visita a Puerto Rico. Organizamos una exhibición de arte con influencers puertorriqueños en Miami para exhibir las cartas e historias de las personas que conocimos con el objetivo de crear conciencia de que Puerto Rico todavía necesita ayuda. Además, para el resto de 2019, nos hemos asociado con la ONG Mentes Puertorriqueñas en Acción para ayudar a la juventud puertorriqueña en la isla y en Florida a encontrar trabajos gratificantes.

Carlos Correcha-Price es Gerente General de Edelman Colombia & Miami.